En la noche de lunes aproximadamente a las 22:30 dos microtaficantes fueron detenidos por la Policía en la zona del Colegio Coreano, en la intersección de la calle Alfredo Seifergell, quienes, tenían en su poder crack y cocaína.
Tras un patrullaje de rutina los agentes policiales, divisaron el vehiculo en la cual se movilizaban los ahora detenidos, y tras ordenarle que detuvieran la marcha del rodado, procedieron a verificar la identidad de los mismos para posteriormente iniciar un cateo del vehiculo encontrando debajo de uno de los asientos pelotitas de crack y seis gramos de cocaína.
Los detenidos fueron identificados como Sergio Conrado Paiva (25) y Luís Benítez (28) quienes, al momento de su detención manejaban una camioneta Nissan Navara.
La Policía presume que los mismos serian distribuidores y que la zona donde fueron detenidos es su área de influencia y que que estarían comercializando las drogas a los alumnos del Colegio Coreano y clientes del la zona.
Con la detención de estos micros traficantes la Policía dio un duro golpe al narcotráfico, pero esto no es suficiente ya que los grandes distribuidores de las sustancias prohibidas siguen operando.
Tras un patrullaje de rutina los agentes policiales, divisaron el vehiculo en la cual se movilizaban los ahora detenidos, y tras ordenarle que detuvieran la marcha del rodado, procedieron a verificar la identidad de los mismos para posteriormente iniciar un cateo del vehiculo encontrando debajo de uno de los asientos pelotitas de crack y seis gramos de cocaína.
Los detenidos fueron identificados como Sergio Conrado Paiva (25) y Luís Benítez (28) quienes, al momento de su detención manejaban una camioneta Nissan Navara.
La Policía presume que los mismos serian distribuidores y que la zona donde fueron detenidos es su área de influencia y que que estarían comercializando las drogas a los alumnos del Colegio Coreano y clientes del la zona.
Con la detención de estos micros traficantes la Policía dio un duro golpe al narcotráfico, pero esto no es suficiente ya que los grandes distribuidores de las sustancias prohibidas siguen operando.
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